Cuando el avión donde viaja Nikolai "Kolya" Rodchenko debe realizar un aterrizaje de emergencia en suelo soviético, el mundialmente famoso bailarín tiene razones para sentirse inquieto: unos años antes, cuando era la gran estrella del ballet ruso y un icono de la propaganda comunista, Kolya desertó y se instaló en los Estados Unidos. Ahora, contra su voluntad, vuelve a un país cuyo gobierno le considera un traidor.